Get your own Digital Clock

miércoles, 7 de octubre de 2009

EL CANAL DE SAN FERNANDO


El pueblo de San Fernando nació, creció y prosperó a la vera de su canal. Al ser fundada la villa en los lejanos tiempos coloniales la preocupación principal de los que se dispusieron su creación, fue la de construir su Canal, su puerto. Era tan indispensable para la naciente población tenerlo, como lo sigue siendo en la actualidad, después de más de ciento setenta y dos años de su fundación. El movimiento, la vida de San Fernando, estuvo siempre en la ribera de su Canal. Fue el manantial de su progreso, la fuente de su alegría, en el esfuerzo diario por la eterna renovación y prosperidad de la vida. En los tiempos en que todavía el ferrocarril no había llegado con su ramal hasta la “Punta del Muelle” y aún después que ello ocurriera, el Canal era lo que podríamos llamar “el centro de la población”. Toda su zona era un lugar amable y pintoresco, viejas carretas tiradas por bueyes llegaban en busca de las frutas que traían los barcos desde las islas y los productos que llegaban del Paraguay. En 1580 don Juan de Garay dio suerte de tierras a sus capitanes, en la región de Las Conchas, ocupadas entonces por los indios guaraníes. En 1600 se establecieron tahonas para moler el trigo, sobre la corriente del río de Las Conchas. Treinta años más tarde se trasladaron al lugar setenta vecinos, vascos y andaluces en su mayoría, los cuales comerciaban con cueros y otros productos del Paraguay; la villa prosperó notablemente, a pesar de los continuos temporales que destrozaban los sembrados y las casas. Pero tal fue la frecuencia de los mismos a principios del siglo xix, y tan irreparables las desgracias que ocasionaron, que se pensó en el traslado del pueblo a un lugar más seguro. El 5 y 6 de junio de 1805, un violento temporal destruyó gran parte del pueblo siendo tan extraordinaria la creciente del río y tan impetuoso el viento sudeste, que más de treinta embarcaciones fueron arrojadas a la costa y destruidas las viviendas de muchos pobladores. En vista de ello las autoridades se dirigieron al Virrey pidiéndole dispusiera las medidas necesarias para evitar en lo sucesivo las “pérdidas y riesgos experimentados en el último temporal”; así se expresaba el presbítero San Ginés en carta al Virrey. El Virrey Sobremonte comisionó a los capitanes de navío don Santiago de Liniers y don Eustaquio Giannini para examinar el sitio en el que podría abrirse un nuevo canal con la mayor proximidad al sitio llamado La Punta, donde se ha propuesto hacer la nueva población, e indicar el terreno para dicho pueblo. El 29 de noviembre del mismo año, el ingeniero Giannini concluyó los planos para la construcción del Canal y la nueva Villa. El 1º de febrero de 1806 el virrey de Sobremonte, acompañado por su esposa y una gran comitiva, llegaron al lugar en que se fundaría la Villa. En la mañana del día siguiente, el virrey y sus acompañantes se dieron a la tarea de colocar la piedra fundamental del templo y a las cinco de la tarde, pasaron a recorrer la delineación del Canal y “tomando la azada que ya estaba preparada por el indicado Comandante Don Carlos Belgrano, lleno de los deseos de la mayor felicidad de estas provincias, invocando la bendiciones del Altísimo, con toda energía y espíritu que le animan, rompió la tierra, en nombre de nuestro rey y señor don Carlos iv ,entre vivas y aclamaciones al son de la banda de música del regimiento de Dragones,y le sustituyeron las personas de distinción que le acompañaban y echándoles monedas a los indios. El ayudante mayor Carlos Belgrano fue nombrado comandante militar de la nueva villa a la que se dio el nombre de San Fernando de Buena Vista, y encargado de la dirección y de la construcción del Canal siendo además autorizado para repartir como merced o en venta, solares y terrenos para huertas o quintas de los nuevos pobladores. Cuatro meses después de haberse inaugurado las obras, se habían excavado 387 varas de largo por dos de ancho y una de hondo entrando el bote de Marcos Sam payo cargados de postes de ñandubay.La excavación la realizaban prisioneros ingleses provenientes de las invasiones e indios catequizados. La construcción del canal sufre varias vicisitudes a través de su historia, pero el gobierno de 1821, estableció a modo de límite entre San Fernando y las conchas el canal de San Fernando. Recién en la presidencia de Bernadino Rivadavia se dio impulso a la obra. El 3 de marzo de 1848 don Antonio Reyes fue designado por Rosas Juez de Paz de San Fernando,y bajo su dirección no solo se reanudaron las obras del Canal tantas veces abandonadas, sino que se hizo del lugar de un hermoso paseo. Por ley del congreso nacional dada el 16 de julio de 1863 se autorizo al señor Eduardo Hopkins la construcción de un muelle y depósitos necesarios del Canal de San Fernando El 20 de agosto de 1875 la intendencia Municipal de San Fernando y el ingeniero Luis Huergo convienen en un contrato para la construcción del actual Dique de Carena. El 29 de diciembre 1887 el congreso nacional concedió por medio de la ley 2098 autorización ala firma Emilio Nouguier y CIA., para la construcción de una vía férrea que empalmando en la de la estación Belgrano, de la línea a Rosario, terminase en el Tigre.,la concesión fue trasferida ala compañía “Ferrocarriles Pobladores”,luego se procedió ala construcción de un puente giratorio sobre el canal para el paso del ferrocarril mencionado. Estos son agrandes rasgos los principales antecedentes del único puerto y canal municipal que posee la republica Argentina. En torno a el aun hoy se desenvuelve la actividad comercial de la zona .Cargado de historia espera con optimismo un desarrollo integral acorde con las actuales circunstancias.

No hay comentarios:

Publicar un comentario